Recientemente se incorporaron a la Mesa del Marco de Consenso Ético el Colegio de Cirujano Dentistas de Chile y se reincorporó el ISP, les damos la cordial bienvenida y queremos conocer sus opiniones.
El Dr. Rolando Schulz Vidal es un reconocido cirujano dentista chileno con una vasta experiencia y formación académica. Obtuvo su título de Cirujano Dentista en 1961 de la Facultad de Odontología de la Universidad de Chile, seguido de un título de Especialista en Ortodoncia en 2000 de la misma institución.
Durante su carrera, desempeñó roles docentes de gran importancia. Fue docente de la Cátedra de Ortodoncia en la Facultad de Odontología de la Universidad de Chile desde 1963 hasta 1979, alcanzando el grado académico de Profesor Asistente. Además, ejerció como docente en el Hospital Clínico José Joaquín Aguirre de la Universidad de Chile desde 1963 hasta 1999, ocupando la Jefatura del Departamento de Ortopedia Dento-Máxilo-Facial y Ortodoncia desde 1974 hasta 1999.
El Dr. Schulz Vidal también ha tenido una destacada labor como docente en cursos de perfeccionamiento y capacitación en Ortopedia Dentomáxilofacial y Ortodoncia en la Escuela de Postgrado de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, así como en la Universidad de Talca, donde ocupó cargos de profesor asociado y responsable de asignaturas tanto en pregrado como en programas de especialización.
A nivel gremial, ha sido un miembro activo del Colegio de Cirujano Dentistas de Chile desde 1997 hasta hoy, ocupando la presidencia nacional del colegio entre 2003 y 2006. Durante su gestión, se destacó por su labor en directivo en los departamentos de: Acción Social; Cultura y Recreación. Actualmente, el Dr. Schulz es consejero nacional y miembro del Departamento de Ética del Colegio.
1.- ¿Qué los motivó a sumarse a la Mesa del Marco de Consenso Ético?
A mi entender nos motivó unirnos a la Mesa del Marco de Consenso Ético el anhelo de restaurar la plena autoridad ética de los Colegios Profesionales y que esta sea aplicable tanto a profesionales colegiados como a no colegiados. Aspiramos a que se reconozca nuestra condición como Instituciones de Derecho Privado con un Rol Público, petición que ha sido ignoradas por los distintos gobiernos democráticos. Dicho aquello, apreciamos la modificación constitucional realizada en 2005 (gobierno del Presidente Lagos), al introducir en la Constitución Política de la República de Chile la norma que reconoce a los Colegios Profesionales, la facultad de conocer y juzgar la conducta ética de sus miembros colegiados. Creemos que esta Mesa del Marco de Consenso Ético proporciona una instancia válida para ser escuchados por las autoridades respecto de la importancia que tiene la ética en todo ámbito humano, pero por sobre todo, en el área de la salud.
Además, reconocemos la importancia de intermediar directamente con todos los actores del sistema de salud, incluyendo pacientes, profesionales, la industria y el Estado, para construir consenso sobre ciertos mínimos éticos que son fundamentales para la ciudadanía en las interacciones que ocurren en la salud. Establecer estos estándares éticos es crucial para garantizar relaciones saludables y transparentes entre todos los implicados, promoviendo así la confianza en el sistema de salud y asegurando el bienestar de la sociedad en su conjunto.
2.- Ustedes recientemente desarrollaron su Código de ética ¿Cuáles han sido los aprendizajes que han tenido en la implementación?
El desarrollo de nuestro nuevo Código de Ética en el Colegio de Cirujano Dentistas de Chile ha sido enriquecedor. Nos permitió explorar las raíces de la Ética desde la antigua Grecia hasta la actualidad, tanto en el ámbito filosófico como en el de la Bioética, lo que es especialmente aplicable a las carreras de la salud. A su vez y a este respecto considero que el control ético del actuar profesional debe ser responsabilidad plena de los Colegios Profesionales, ya que los Tribunales Ordinarios de Justicia, al enfrentar reclamaciones contra profesionales no colegiados, deben recurrir a peritos o especialistas, función que proporcionamos como Colegio para resolver estas cuestiones.
A su vez cabe evidenciar que en nuestro proceso de desarrollar un nuevo Código de Ética al interior del Colegio de Cirujano Dentistas de Chile, hemos aprendido que no basta con dictar un Código Ético; es fundamental darle la amplia difusión que requiere para que los cirujanos dentistas y pacientes lo conozcan y comprendan el decálogo ético que rige nuestro actuar profesional. Por tanto, como Colegio, estamos trabajando en mejorar la difusión de este cuerpo normativo entre la comunidad. Además, la pandemia nos dejó un importante aprendizaje: la necesidad continua de modernizar este cuerpo ético para que pueda dar respuesta a las nuevas necesidades de la población. En este sentido, hemos incorporado un nuevo capítulo sobre "el rol del cirujano dentista en situaciones de emergencias y desastres de salud", reconociendo así la importancia de adaptarnos y responder de manera ética y eficaz ante desafíos sin precedentes, cómo lo son las pandemias o desastres naturales.
3.- ¿Qué esperan de este trabajo colaborativo entre múltiples actores del ecosistema?
En este trabajo colaborativo entre múltiples actores del ecosistema de salud, esperamos avanzar en nuestro objetivo de ser mejores profesionales, comprometidos con los grandes principios y valores éticos que rigen el actuar en salud. También aspiramos a concretar lo que aún está pendiente mediante una Ley de la República que permita recuperar las potestades que históricamente teníamos, ya que la colegiatura habilitante otorga a los Colegios Profesionales un papel fiscalizador sobre el correcto ejercicio de la carrera garantizando que los cirujanos dentistas, independientemente de su formación universitaria, respeten mínimos éticos en su quehacer profesional.
Creo que en este trabajo colaborativo entre múltiples actores del ecosistema de la salud, es fundamental reconocer la importancia de escuchar y considerar las perspectivas de todos los involucrados, especialmente a los pacientes e industria. La participación activa de estos actores es esencial para identificar sus necesidades, preocupaciones y aspiraciones en materia ética de nuestro actuar profesional. Al escuchar sus voces, podemos alcanzar puntos de acuerdo que se materialicen en un decálogo de principios éticos ampliamente aceptado y respetado por toda la comunidad relacionada con el tema salud. Finalmente, creo que establecer y acordar estos principios éticos no solo promoverán relaciones más transparentes y equitativas entre los diferentes actores, sino que también fortalecerán la confianza del público en el sistema de salud en su conjunto.
Para el Instituto la Mesa de Consenso Ético es una instancia sumamente valiosa para relacionarnos de manera colaborativa con los actores que participan en el sector salud, y particularmente en relación con entidades privadas que comercializan medicamentos y dispositivos médicos. Esta participación nos
permite, además, conocer de cerca la implementación de los códigos de ética por parte del sector regulado desde un enfoque horizontal.
1. ¿Qué los motivó a sumarse nuevamente a la Mesa del Marco de Consenso Ético?:
Nos motivó a sumarnos a la mesa la necesidad de conocer de cerca cómo los distintos actores privados van ajustando su actuar a los requerimientos internacionales en materia de transparencia, entendiendo que la legislación será cada vez más exigente en ese sentido. Como contrapartida, conocer esos avances nos permitirá, como Instituto, prepararnos adecuadamente para enfrentar estos desafíos desde nuestro rol regulador.
2. ¿Qué esperan de este trabajo colaborativo entre múltiples actores del ecosistema?
Por ello, confiamos en el compromiso transversal de todos los integrantes de la mesa hacia los valores éticos que promueve la mesa, y que tienen como fin el bienestar de las personas.
3. ¿Cómo pueden aportar las organizaciones del Estado al trabajo colaborativo de esta mesa?
Finalmente, considerando que las organizaciones del Estado debemos, por definición, servir a la comunidad y cumplir con una serie de principios valiosos para la mesa, como la probidad y la transparencia, contamos con una visión arraigada que vela siempre por el bien común por sobre otras cosas. Esa posición, a nuestro juicio, nos permite aportar en muchas de las actividades y, en cuando entidades fiscalizadoras, conocer la viabilidad de implementación de una buena práctica y su idoneidad para ser controlada.
