Entre 2013 y 20161, la OCDE realizó un estudio que analizó el subsidio para comprar una vivienda construida de hasta 950 UF (DS49) y el Programa de Subsidio de Arriendo (DS52), en donde se reconoce que Chile ha progresado considerablemente en la promoción del acceso a viviendas asequibles de buena calidad en las últimas dos décadas y que la proporción de hogares que no tienen vivienda o que viven en viviendas de calidad inferior ha caído del 23% en 1992 al 10% en 2011.
Por otra parte, la OCDE ha sugerido que un mayor acceso a la vivienda arrendada para familias de ingresos bajos y medios puede ayudar a mejorar la movilidad residencial y reducir la segregación. Al respecto, la organización ha resaltado el programa de subsidio de arriendo (del 2013), que se inició como un piloto para familias jóvenes, sujetos a la condición socioeconómica. El subsidio permite el cambio por reubicación y brinda alguna flexibilidad de pagos para evitar desahucios ante una pérdida temporal de ingresos. Este programa se ha ampliado y flexibilizado con el tiempo y hoy se utiliza también para apoyar a adultos mayores, familias de clase media, familias que viven en condiciones de hacinamiento extremo y más recientemente, como un apoyo transitorio a aquellos arrendadores que han perdido el empleo producto de la crisis económica del COVID-19. Para la OCDE, este programa es un buen inicio para una política habitacional con una postura más neutral respecto a la propiedad de la vivienda en Chile; sin embargo, se recomienda considerar acciones que apoyen la oferta de viviendas para arriendo privadas y de buena calidad, pero también de tipo social.2
En relación a lo anterior, desde hace unos años el MINVU se encuentra trabajando en un nuevo programa que permita entregar incentivos para la generación de oferta de viviendas en arriendo. A la fecha, se han realizado algunos proyectos piloto donde los municipios son los gestores, pero se espera que el nuevo programa permita que tanto el sector público como el privado puedan participar de la provisión de viviendas en arriendo en ubicaciones céntricas, propendiendo a la integración social. Este programa debiese comenzar a operar dentro de los próximos años.
Para nuestro país ha sido muy importante participar en la elaboración y contar con los instrumentos de la OCDE en materia de vivienda. Es así como la base de datos de Viviendas Asequibles 2019 de la OCDE ha sido una herramienta fundamental para supervisar el acceso a viviendas asequibles de buena calidad y fortalecer los conocimientos para la evaluación de políticas. Junto a otros 44 países, nuestro país proporcionó información específica para la elaboración de esta base de datos.3
1 Salvi del Pero, A. (2016), "Housing policy in Chile: A case study on two housing programmes for low-income households", OECD Social, Employment and Migration Working Papers, No. 173, OECD Publishing, Paris.
2 OECD Better Life Index: Vivienda en Chile; http://www.oecdbetterlifeindex.org/es/topics/housing-es/
3 Análisis para Chile disponible en el siguiente enlace: http://observatoriodoc.colabora.minvu.cl/Documentos%20compartidos/LINKS/2020%2003%2031%20Informe%20OCDE-CHILE.pdf